Unas veces por exigencias de la vida laboral y personal, otras para evitar el calor del verano o por buscar descargar toda la tensión del día… en todo caso, salir a correr por la noche se ha convertido en algo más que una costumbre aislada.
Ya no sólo nos encontramos con corredores en solitario que salen a entrenar tras el ocaso. Hablamos de grupos, hablamos incluso de otras formas de compartir con los amigos las noches del fin de semana. Sustituir las noches de fiesta y posterior resaca por salidas nocturnas para compartir kilómetros y salud, es ya un hábito cada vez más extendido.
Si a todo ello añadimos las temperaturas en verano, con olas de calor incluidas, las condiciones para salir a correr durante el día son difíciles de asumir. El resultado, una tendencia cada vez más común a la organización de carreras de diversa índole en horarios cercanos a la medianoche.
Por citar algún caso, nos encontramos en Córdoba un circuito de carreras populares en las que casi su totalidad se desarrolla a última hora de la tarde. Córdoba no perdona si hablamos de temperaturas extremas, y por ello resulta todo un éxito situar un calendario veraniego repleto de eventos nocturnos repartidos por toda la provincia. Es de agradecer disfrutar de unas jornadas de deporte popular en las que las condiciones de calor extremo no son un impedimento.
Diversos estudios confirman los beneficios de salir a correr de noche. Por un lado, se incrementa la sensación de velocidad, ya que al no poder tomar una referencia lejana por la falta de luz, tomamos los objetos cercanos como apoyo y por ello entendemos un avance mucho más rápido en nuestro ritmo. Por otro lado, la ausencia de contaminación acústica si corremos en núcleos urbanos, con menos afluencia de tráfico alrededor, nos permite disfrutar del running con más intensidad, ofreciéndonos de ese modo un momento de relax después de la jornada laboral.
Además se habla de que el cuerpo podría estar más preparado para el deporte a última hora del día, debido a un mayor rendimiento metabólico a esas horas a nivel pulmonar y energético.
No nos olvidemos, además de las carreras nocturnas antes mencionadas, otros eventos que se realizan en horarios nocturnos realmente singulares, como las “We own the night”, para runners femeninas, que suelen acabar en un show de luces y música en directo; o las “Electric Runs”, en las que los corredores sincronizan sus zancadas al ritmo de la música.
Por último, las “Speed of light” se acercan más al lado más artístico del deporte, ya que se trata de carreras silenciosas en las que cada participante viste ropa deportiva con motivos reflectantes de diversos colores y que forman increíbles paisajes humanos luminosos.
En un #123acorrer también nos hemos unido al running nocturno. Sin ir más lejos el pasado 23 de julio celebramos la I Carrera Solidaria Santander en el Espinar, con la presencia de Abel Antón como invitado estrella. La prueba resultó un auténtico éxito.
Si sueles salir a correr a las últimas horas del día, te aconsejamos que tengas en cuenta unas mínimas reglas de seguridad. Debes utilizar diversas formas de señalización para ver y ser visto sin mayor problema.
También es recomendable no acostarse inmediatamente después del ejercicio, para permitir al cuerpo que tenga una vuelta a la calma progresiva y así consigamos una mejor calidad de sueño.