La séptima prueba del circuito llegó a la capital hispalense el domingo 9 de octubre con un recorrido perfecto en distancia y tiempo para disfrutar de una gran ciudad. La carrera tuvo un trayecto de 6,6 kilómetros, haciendo coincidir la salida y la llegada en el mismo punto: la Calle de la Rábida. A eso de las 10 de la mañana, las miles de corredoras salieron para conquistar una nueva prueba en una de las ciudades más bonitas de nuestra geografía.
Las participantes contaron con un tiempo de una hora y treinta minutos para completar un genial recorrido que les llevó a bordear el Parque de María Luisa o la Plaza de España, dejando una estampa para el recuerdo en uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad.
Tras esto, en la meta, un sinfín de actividades, como en cada evento de la Carrera de la Mujer. Clases de zumba o fitness para que en los momentos posteriores a la carrera se siguiera celebrando un día único al año, en el que nuestras valientes guerreras puedieron compartir unas horas plácidas mientras que el deporte era protagonista.
Esta magnífica iniciativa, patrocinada una vez más por el Banco Santander, contó con 50 dorsales solidarios, los cuales tuvieron un precio de 20€ y fueron donados, íntegramente, a AMAMA Sevilla, la Asociación de Mujeres Contra el Cáncer de Mama de la ciudad.
Tras esta prueba de la Carrera de la Mujer, el evento estará cerca de llegar a su final, tras haber recuperado la normalidad este año, con las dos últimas carreras del recorrido. Zaragoza el 23 del mismo mes y Barcelona el 6 de noviembre, donde volveremos a desplegar el lazo rosa mas grande del mundo.