En #123acorrer hemos hablado ya de ciertas maratones especiales, distintas, destacables por su belleza o por su dureza, a veces por ambas cosas a la vez. Si la famosa revista Forbes nombra a la “Big Five Marathon” como una de estas 10 maratones de todo el mundo que hay que vivir desde dentro, significa que merece la pena pararse a conocer esta prueba con más detenimiento.

La “Big Five Marathon” es una prueba que se realiza durante el mes de junio al norte de Sudáfrica, en una reserva natural situada en Waterberg. El escenario no puede ser más atractivo: temperaturas de 15 a 20 grados en esta época del año, parajes repletos de la fauna africana más espectacular, y un recorrido en el que la señalización, las vallas o cualquier otro medio artificial que nos separe de la vida salvaje es inexistente.

Ríos, colinas, desfiladeros y otras tantos accidentes geográficos naturales nos aseguran un recorrido a salvo de cualquier peligro, sólo nos queda disfrutar del espectáculo que nos rodea, a pesar del desnivel acumulado que en ocasiones nos lleva a tramos  con rampas que rozan el 40%.

El nombre de “Big Five” nos remite a los habitantes más voluminosos de esta región: elefantes, rinocerontes, búfalos, leones y leopardos conviven en esta región de la sabana africana. ¿Alguna vez hemos participado en algún maratón con espectadores tan especiales?

Estamos ante una prueba en la que el número de participantes no puede ser muy grande debido a las limitaciones logísticas y de preservación del medio ambiente. La magia que envuelven estos parajes, más conocidos como “Entabeni Game Reserve”, hacen de esta prueba una de esas en las que debes participar una vez en la vida, según los que ya la probaron.

Desde 1999, fecha en la que Soren Rasmussen organizó por primera vez esta maratón, su leyenda ha ido aumentando de edición en edición. En esta última, las danesas Anne-Sophie Eriksen Wendell y Sabine Hvdam Pedersen llegaron a meta a la par, con un tiempo de 3:45.24, por delante incluso del primer clasificado masculino, el australiano Justin Keane.

Con la posibilidad de participar también en la prueba de media maratón, la “Big Five” apuesta por la aventura por encima de la competición.