La Marea Rosa volvió a Barcelona en una Carrera de la Mujer que mantuvo el espíritu solidario de las ediciones anteriores. Unas 19.000 corredoras salieron de la Avenida María Cristina, en la Plaza de España, justo delante de la Fuente Mágica de Montjuic, y recorrieron un total de 8 km hasta la avenida Rius i Taulet. Un atractivo recorrido en donde las participantes disfrutaron del colorido que envolvió a las calles de la capital catalana. Un ambiente festivo que se prolongó durante toda la mañana en una ciudad que volvía a recibir a este gran evento después de la pandemia.
A primera hora de la mañana, la Plaza de España estuvo preparada para la carrera multitudinaria que coloreó de rosa la ciudad. La expectación era máxima. Aparte de las 19.000 personas que cruzaron la línea de salida, muchas otras esperaban con impaciencia a que la carrera comenzara. Antes de que se produjera el pistolezo de salida, el turno de los homenajes se convirtió en la antesala de la esperada Carrera de la Mujer de Barcelona. La tenista Carla Suárez, que acompañó a las corredoras durante el recorrido como colaboradora de Sports Santander, recibió el reconocimiento del resto de mujeres. Tras superar un cáncer, la deportista se volvió a vestir de corto demostrando que su actividad física está volviendo poco a poco a la normalidad. Otro de los grandes homenajes lo recibió la atleta paralímpica Mari Carmen Paredes, un gran ejemplo para todas las mujeres deportistas por su compromiso, trabajo, esfuerzo, dedicación y trayectoria.
Tras los homenajes, las participantes completaron, con su dorsal 016, el recorrido con una gran sonrisa. La ocasión lo merecía. Esta carrera mantiene el esfuerzo por incorporar a las mujeres de todas las edades a la práctica habitual del deporte, luchar contra el cáncer y concienciar sobre la importancia de la prevención, así como promover hábitos de vida saludables para evitarlo en la medida de lo posible, y combatir la violencia de género y las desigualdades sociales y educativas que sufren las mujeres.
En lo deportivo, Jessica Bonet se colgó la medalla de ganadora con un tiempo de 31:13 al final de recorrido. Este tiempo llevaba buscándolo durante varios años. En 2019, la catalana fue la tercera clasificada en la carrera y, en esta cita ya tradicional para ella, confirmó el gran esfuerzo y dedicación que tiene puestos en este tradicional circuito.
Las medidas de seguridad estuvieron garantizadas en una cita que concentraba a un gran número de personas y que se convirtió, desde la salida, en una gran fiesta. Este evento pretende seguir luchando contra el cáncer de mama. La donación a la Asociación Española contra el Cáncer, al término del circuito, será uno de los objetivos prioritarios. Se seguirá apoyando económicamente a tres fundaciones que protegen a las mujeres en distintos ámbitos. Wanawake Mujer, Pulseras Rojas y Clara Campoamor serán las grandes beneficiadas con el objetivo de seguir realizando un encomiable trabajo con las mujeres.
El Banco Santander, patrocinador de la Carrera de la Mujer, volvió a estar presente en un recorrido que fue un verdadero éxito entre las ciudadanas de Barcelona. Próxima parada: Sevilla.